TESTIMONIOS REALES DE AMIGOS CON TARTAMUDEZ
QUE ASISTIERON A UN TIPO DE TRATAMIENTO

1.a) Persona con Tartamudez: Jorge Alonso Rodríguez Briones

En realidad escribo este testimonio según como lo estoy sintiendo y
viviendo, para contar mi experiencia en mi terapia con la fonoaudióloga
Anita Quintana, pese al poco tiempo que llevamos, mas menos 7 meses, en lo
personal me ha servido mucho pues he aprendido a manejar mis bloqueos, y a
establecer una nueva forma de hablar más pausada.
También con la profesional se generado un feeling especial, confianza y
complicidad una buena relación profesional paciente que ha permitido lograr
avanzas sustantivos pese al poco tiempo.
Hay que agregar también que desde el principio se dejó claro que el
tratamiento no iba por conseguir una cura para la tartamudez, sino que iba por
buscar una mejora en la calidad de vida, bajando la ocurrencia de los
bloqueos con técnicas para la disminución de estos.
La experiencia ha sido buena y de cierto modo divertida por que en sesión
se da un ambiente distendido, relajado y alegre, cosa que en mi caso ha
ayudado a los importantes avances que he tenido.
Por último recalcar y hacer el hincapié necesario que la difluencia del
lenguaje (Tartamudez) hasta ahora no tiene una cura pero sí las terapias
ayudan a mejorar la calidad de vida del difluente dándole técnicas para el
manejo de los bloqueos; este punto hay que tenerlo bien internalizado y
sabido para para éxito del tratamiento
Como ven amigos mi experiencia ha sido buena y los avances grandes pues veo
con fe y mucha esperanza el futuro y los pasos ya dados y los que daré.

Atentamente

Jorge Alonso Rodríguez Briones
Comunicador y Relacionador Público
Adulto

1.b) Respuesta del terapeuta: Fonoaudióloga Anita Quintana

En primer lugar quisiera aclarar que la información que aquí compartiré ha sido con el
previo consentimiento del señor Jorge Rodríguez. A continuación comparto mi
perspectiva de esta experiencia.
Un día Jorge me escribe para decirme que deseaba iniciar una terapia para la tartamudez
conmigo. Lo primero que me llamó la atención fue la tenacidad con la que él buscó
financiamiento para su terapia, golpeando puertas hasta lograr obtener lo q necesitaba.
Una vez que llevamos a cabo la entrevista inicial y la evaluación, supe que el trabajo
que teníamos por delante sería un desafío, debido la edad de Jorge y la severidad de la
disfluencia, ya que siempre es más fácil el tratamiento de la tartamudez cuando se lleva
a cabo en la infancia. Teniendo en cuenta esto, conversamos con respecto a las
limitaciones y posibilidades de la terapia, y una vez que ambos tuvimos claro nuestro
objetivo, nos dispusimos a empezar con este viaje.
La experiencia de trabajo fue muy grata, ya que Jorge ha asistido de manera muy
regular a las sesiones de terapia, logrando incorporar varias de las técnicas de control
de los bloqueos que trabajamos en las sesiones. En su caso, utilizamos principalmente
el habla enlentecida y la prolongación de la sílaba inicial de la palabra. Con el manejo
coordinado de las técnicas aprendidas, Jorge logró en un año de trabajo disminuir los
bloqueos tipo tartamudez en su discurso en un 6%. Además, disminuyó la cantidad
de repeticiones de sílabas repetidas al inicio de las palabras de 2 ó 3 a sólo una.
Por otro lado, su percepción hacia la tartamudez y hacia sí mismo mejoró de manera
significativa, lo que en muchos casos es mucho más importante que el control del
habla propiamente tal. Pese a que los logros han sido significativos tanto desde mi
punto de vista, como para Jorge, aún nos quedan algunos retos que enfrentar, como
la emisión suave de sonidos específicos como “p”, “t”, “k” y “rr”. Además de la
eliminación de algunos gestos asociados. Es por ello que seguiremos trabajando en
conjunto para mejorar estos aspectos.
Finalmente, los animo a seguir el ejemplo de Jorge en cuanto a tenacidad.
Lamentablemente, pese a los avances en la investigación de la tartamudez, aún no
existe una terapia de eficacia probada para todos. Es por ello que si algo no les
funcionó, y realmente desean mejorar su fluidez, no se desanimen. Busquen más
opciones. Pero por sobre todo acéptense y ámense

Anita Quintana Riquelme
Fonoaudióloga

www.tartamudez.cl